Soluciones integrales, desde materias primas hasta equipos de producción de espuma de PU y colchones.
En la producción de espuma viscoelástica de recuperación lenta, el principal reto reside en mantener un rendimiento estable y una dinámica de rebote controlada. La comodidad percibida por los consumidores depende fundamentalmente de la tasa de recuperación de la deformación del material, la cual debe controlarse con precisión dentro de un rango estrecho.
 No debemos tratar el índice TDI simplemente como un número de formulación, sino como un parámetro de ingeniería fundamental para lograr el tiempo de relajación deseado.
En aplicaciones de ingeniería, la selección del índice TDI debe evitar dos límites de falla extremos para garantizar tanto la integridad estructural como la funcionalidad de la espuma.
Zona de transición de alto índice (cercana a 100): Fallo de la función de rebote
 Cuando el índice TDI aumenta de 95 a 100, la tasa de conversión de los grupos funcionales isocianato se incrementa notablemente, lo que conlleva una mayor densidad de puntos de red y restricciones topológicas más estrictas. Macroscópicamente, el módulo de compresión (dureza) y el factor de pérdida de la espuma aumentan gradualmente, y la temperatura de transición vítrea (Tg) del polímero se eleva por encima de la temperatura ambiente.
 Cuando la densidad de entrecruzamiento se vuelve excesiva, la red se comporta casi por completo como un sólido elástico, lo que deja una amortiguación viscosa insuficiente para retrasar la recuperación, eliminando así por completo el efecto de rebote lento.
Zona de fallo de bajo índice (inferior a 80): Fallo de integridad estructural
 Cuando el índice TDI desciende por debajo de 80, el contenido de isocianato es demasiado bajo para una polimerización eficaz, lo que impide la formación de una red estable. Esto se traduce en una baja resistencia, una estructura celular gruesa, una excesiva formación de celdas abiertas y una degradación irreversible de las propiedades físicas. En este estado, la espuma carece de una red polimérica estable y no puede utilizarse en aplicaciones prácticas.
Más allá de la “densidad de entrecruzamiento”, el índice TDI controla la velocidad de rebote al alterar el comportamiento de la región de transición vítrea (Tg) del polímero y la distribución del tiempo de relajación de la cadena.
 Al influir en la densidad efectiva de entrecruzamiento y las interacciones intermoleculares, los cambios en el índice TDI modifican la región Tg y la dinámica de relajación, afectando en última instancia la tasa de recuperación de la deformación macroscópica.
 Regulación del índice TDI (80–95):
 Dentro de este rango central, pequeños ajustes al índice TDI pueden desplazar sistemáticamente la región Tg de la red polimérica para que se solape parcialmente con la temperatura ambiente. Cuando la Tg se aproxima a la temperatura de servicio, la relajación de los segmentos de la cadena se maximiza, lo que permite que la espuma se recupere lentamente tras la compresión, logrando así la dinámica de rebote lento deseada.
El sistema de espuma de recuperación lenta no es exclusivo del TDI. En las espumas viscoelásticas basadas en MDI (diisocianato de difenilmetano), la relación entre el índice de isocianato y el rendimiento de recuperación difiere fundamentalmente.
El sistema TDI presenta menor reactividad y un comportamiento exotérmico más suave, lo que permite un mejor control de la velocidad de reacción. Su rango de índice ideal para un rebote lento es estrecho (típicamente entre 80 y 95), con un punto crítico cercano a 100.
 En contraste, el sistema MDI presenta mayor reactividad y tiende a formar enlaces de urea, lo que da lugar a estructuras más complejas. Para lograr una amortiguación viscosa suficiente y prolongar el tiempo de relajación, las formulaciones de MDI suelen requerir índices más altos, incluso superiores a 10⁵. Esto se debe a que el sistema MDI se basa principalmente en la separación de microfases entre segmentos blandos y duros para la reticulación física, en lugar de en la densidad de reticulación puramente química.
Si bien el índice TDI es fundamental, su efecto real debe ajustarse con precisión dentro de todo el sistema de formulación.
 Influencia de los polioles:
 Los polioles de alta funcionalidad aumentan los puntos de reticulación iniciales, lo que favorece una recuperación más rápida de la espuma. Por el contrario, los polioles de bajo peso molecular o más flexibles requieren una disminución del índice TDI para mantenerse dentro de la «zona dorada» de 80-95 y lograr el mismo tiempo de relajación objetivo.
 Efectos de otros componentes:
 El agua y los agentes espumantes físicos afectan la estructura y la densidad de los poros, mientras que los tensioactivos, como los aceites de silicona, influyen en la estabilidad de la pared celular. Estos factores alteran la distribución de tensiones y el comportamiento de relajación de la red polimérica, lo que exige una calibración precisa del índice TDI por parte del formulador.
El éxito de la espuma de rebote lento radica en lograr una dinámica de recuperación de la deformación específica.
 Al ajustar el índice TDI, los ingenieros pueden modificar sistemáticamente la estructura de la red y la región Tg, controlando con precisión el tiempo de relajación; este es el principio de ingeniería fundamental del diseño de formulaciones de espuma con memoria.
¡Simplemente deje su correo electrónico o número de teléfono en el formulario de contacto para que podamos enviarle una propuesta gratuita!
Persona de contacto: Wenky Lau
Número de contacto: +86-15687268672
Correo electrónico: sales1@alforu.cn 
WhatsApp:86 15687268672
Dirección de la empresa: NO. 18 South Industry Road, ciudad de Dongguan, provincia de Guangdong China